La Secretaría de Trabajo, Empleo y Seguridad Social, dependiente del Ministerio de Capital Humano, informó que se ha dictado la conciliación obligatoria en el conflicto laboral entre que agrupa a los controladores aéreos y los organismos del Estado vinculados al servicio de navegación aérea: la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA S.E.) y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
Las medidas de fuerza de la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (ATEPSA) estaban planificadas para realizarse a partir del 11 de julio, afectando el gran movimiento de pasajeros por las vacaciones de invierno.
«La medida, que rige desde las 00:00 horas del 11 de julio de 2025, se encuadra en la Ley N.° 14.786 y establece un período de conciliación de 15 días, motivo por el cual las partes deberán retrotraer la situación al estado anterior al inicio del conflicto», señala la comunicación del Ministerio.
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El Ministerio de Capital Humano intimó a ATEPSA a dejar sin efecto las medidas de fuerza durante el período de conciliación y prestar servicios de manera normal y habitual.
Además, intimó a EANA, a retrotraer los despidos por el plazo que dure el presente procedimiento conciliatorio.
«El Estado Nacional tiene el deber de garantizar la continuidad de los servicios esenciales para sus ciudadanos y resguardar el interés público, sin desatender los derechos laborales ni los mecanismos de negociación colectiva».
Las medidas de fuerza anunciadas por los controladores
ATEPSA había anunciado un cronograma de retención de tareas anunciada por Atepsa para 11, 12, 13, 15, 18, 20, 24, 25, 27 y 30 de julio en diferentes horarios, y no afectarán el arribo de aeronaves sino el despegue.
Desde el gremio argumentan que el conflicto arrastra “10 meses sin respuestas” por parte de la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA), la Administración Nacional de la Aviación Civil (ANAC) y la Subsecretaría de Transporte Aéreo.
Las cámaras y asociaciones que agrupan a las líneas aéreas habían manifestado que la medida de fuerza «conlleva inevitablemente la cancelación de vuelos con las consecuentes pérdidas para pasajeros, clientes de carga, líneas aéreas y otros actores relacionados al turismo como hoteles, gastronomía, excursiones, eventos y congresos, alquiler de vehículos, viajes de salud e innumerable cantidad de comercios en todo el país”.
LM