Los bolsos de hockey y las expresiones de alegría en sus rostros anticipan que otro domingo de entrenamiento está por empezar. La actitud y la constancia de Las Lionas y Los Liones, los jugadoras y jugadores argentinos de hockey sobre césped Mixed Ability (MA), es contagiosa y hace que más familias se unan al proyecto.
«Nos llamamos así porque nos sentimos identificadas con Las Leonas y Los Leones –los seleccionados argentinos de hockey sobre césped femenino y masculino–, porque somos tan humildes como Lionel Messi y porque hacemos mucho lío cada vez que nos juntamos«, le cuenta a Página 12 Sivina Forrester, presidenta de la Fundación Argentina de Hockey Inclusivo (FAHI) y la creadora, junto a su marido Peter Gorrisen, de ambos planteles.
En septiembre de 2017, doce chicas dieron el punta pié inicial y desde aquel momento el número de integrantes de ambos equipos no ha parado de crecer. El impacto social fue tan grande que, en 2021, el seleccionado femenino dio lugar a la creación del plantel masculino, Los Liones. Actualmente, son cien las y los hockistas que entrenan dos veces por semana en el polideportivo Onega de Villa Devoto, en la Ciudad Atónoma de Buenos Aires. La experiencia se replica en catorce provincias del país.
«Somos un grupo de familias con el propósito de acompañar a nuestros hijos, con discapacidad intelectual, desde el deporte«, agrega Forrester, quien además cuenta que Clara Gorrisen, su hija, es la piedra fundamental de este proyecto. «Desde el embarazo, supe que iba a nacer con síndrome de Down, como así también tuve la certeza que se iba a destacar en algún deporte».
A partir de los 5 años, la cuarta hija del matrimonio empezó a jugar el Club Belgrano Atletic, del barrio de Saavedra, pero cuando cumplió los diecisiete años sus padres decidieron que era el momento de adaptar los entrenamientos al modelo MA y proponerlo a otras familias para que se pudieran sumar.
Al año siguiente, la Federación Panamericana de hockey las invitó a participar de los Juegos Olímpicos de la Juventud Buenos Aires 2018, que se desarrollaron en las instalacions del Parque Roca. La demostración les permitió convertirse en el primer plantel de parahockey argentino y latinoamericano.
Al poco tiempo, ya se hablaba de esta disciplina en las provincias del interior y cruzaba las fronteras para llegar a Chile, Uruguay y Canadá, llegando a ser convocados desde Perú en el 2019 para compartir conocimientos y experiencias del modelo que ya estaba dando buenos resultados niñas y a jóvenes con discapacidad.
Las Lionas y Los Liones tienen tres categorías: infantil, juvenil y el plantel superior. Cuentan con jugadores facilitadores, porque en el plantel hay integrantes con retraso madurativo, Trastorno Generalizado del Desarrollo (TGD), síndrome de Down y autismo.
«Yo les digo a los padres que no vengan con expectativas. Hay jugadores que pueden competir a nivel internacional y otros que tiran al arco sin arquero y están felices. Cada chico tiene su propio desafío por conquistar», señala Forrester. «Es un honor entrenar con ellas, porque dentro y fuera de la cancha se fomenta el sentido de pertenencia. Siempre jugué hockey, pero estar dentro de Las Lionas me hizo revivir», cuenta por su parte Valentina Vacchetta, una de las facilitadoras en el área de juego.
«En el grupo, además fomentamos la perseverancia, la paciencia, y la espera», agrega Forrester. «En las giras, el plantel superior, convive sin la supervisión de los padres. Ellos se preparan el desayuno, se tienden las camas y resuelven sus conflictos. Queremos que además de jugar al hockey, tengan una vida independiente. Para las familias es muy importante que sus hijos logren tener un espacio propio donde pueden ser libres”, concluye.
«Es nuestro lugar de contención, un círculo virtuoso en el que todos nos ayudamos con una charla o con un consejo. Cuando ellos están jugando, los papás compartimos lo que nos pasa. No duden en venir, porque acá hay lugar para todos”, cuenta Mariana Lorenzi, la mamá de Lara una de las integrantes del plantel superior.
Durante este año, tienen previsto dos viajes a Mar del Plata. «Las giras son increíbles, a nadie dejamos afuera», confirma Clara Gorrisen, la capitana de seleccionado femenino, mientras que para Simón Gauna, es la oportunidad jugar y divertirse junto a sus compañeros, aunque para el delantero derecho MA, su sueño sea «ser goleador como Lionel Messi».
«Sacarlos de gira, tiene un efecto de unión maravilloso, porque el equipo pasa a ser la familia. Desde el viaje, empiezan a integrarse y para ellos es una experiencia nueva salir de su lugar seguro, es crecimiento», confirma Peter Gorrisen.
A pesar de haber sido reconocido por el Comité Olímpico Argentino (COA), el hockey inclusivo no es un deporte federado condición que los deja afuera para recibir apoyo económico de los organismos estales, limitándolos participar de competiciones internacionales. Por eso el apoyo de algunos sponsors y de las familias de Las Lionas y Los Liones son indispensables para que puedan continuar con los entrenamientos, los viajes y la indumentaria deportiva. Sin embargo, las y los protagonistas de esta historia no pierden las esperanzas. Saben que el camino se construye día a día.