El titular del Interior se expresó sobre los objetivos de su gestión, en un contexto marcado por la derrota electoral del oficialismo y las tensiones con varios mandatarios.
-
Provincias levantan la guardia ante el inminente veto de Milei a la ley de ATN
-
Gobernadores exigen que Catalán tenga «poder de decisión» y apuntan al Presupuesto como primer test
El Ministro también se refirió a la polémica sobre los recursos de ATN.
Foto: Casa Rosada
A horas de asumir como ministro del Interior, Lisandro Catalán subrayó la necesidad de establecer un canal de comunicación directo y constante con los gobernadores. Según indicó, el objetivo de su designación responde a la decisión del presidente Javier Milei de reforzar el diálogo político con las provincias y generar una voz clara de interlocución con los ejecutivos provinciales.
“El Presidente busca jerarquizar la comunicación con los gobernadores para poder atender los temas que requieren decisiones rápidas y efectivas”, explicó Catalán en LN+, quien fue ascendido desde su cargo de vicejefe de gabinete de Interior en medio de las medidas adoptadas tras la reciente derrota del oficialismo en la provincia de Buenos Aires.
Desde la llegada de Milei al Gobierno, varios gobernadores se habían quejado por la falta de interlocutores con poder real para tratar los problemas provinciales. Las críticas se centraban especialmente en la ausencia de fondos, la falta de obra pública en rutas nacionales y la dificultad para canalizar demandas urgentes a nivel nacional.
En este marco, Catalán aseguró que su gestión buscará resolver los problemas de manera directa y mencionó como ejemplos de colaboración positiva a los gobernadores Osvaldo Jaldo (Tucumán) e Ignacio Torres (Chubut). “Queremos un federalismo real, donde las provincias puedan conducir su propio destino, sin que el Estado nacional sobredimensionado genere gastos innecesarios”, afirmó.
Política de recursos y críticas a mandatarios provinciales
El ministro también se refirió a la polémica sobre los recursos de ATN y otros fondos aprobados por el Congreso, sugiriendo que se evaluará el origen de los recursos antes de su distribución: “Las leyes que se aprobaron no establecen de dónde salen los recursos”, explicó, reforzando la postura del Gobierno de vetar la ley sancionada por el Congreso y controlar el equilibrio fiscal para evitar desajustes financieros.
En paralelo, Catalán criticó la gestión de algunos gobernadores, incluyendo a Ricardo Quintela (La Rioja) y Axel Kicillof (Buenos Aires), cuestionando decisiones pasadas y la eficiencia administrativa de sus provincias. Sin embargo, destacó que el foco de su gestión será el diálogo constructivo con todos los ejecutivos provinciales, independientemente de su filiación política.
La mesa política y el vínculo electoral
Como parte de las medidas tras la derrota legislativa, Milei organizó una mesa política nacional y otra bonaerense, convocando a los gobernadores para fortalecer la coordinación territorial. Catalán destacó que su tarea será garantizar una interlocución fluida, resolver temas de manera inmediata y acompañar procesos de gobernanza que incluyan a distintos partidos y referentes provinciales.
“Si tenemos dirigentes que no son empáticos o respetuosos con otros espacios dentro de La Libertad Avanza, se corregirá. Pero el Gobierno mantiene las puertas abiertas para quienes apoyen el proceso en marcha”, señaló.
Con esta estrategia, el oficialismo busca recomponer vínculos con las provincias y fortalecer la gestión federal, en un momento clave tras los resultados electorales y las críticas de los gobernadores sobre la centralización de decisiones y la distribución de recursos.